Por: Mayra Alejandra de la Hoz.
Durante los días 2 y 3 de agosto de 2019, en la Iglesia Santa Rita de Casia, en la ciudad de Cartagena, se estuvo realizando una gran jornada gratuita de atención en salud, dirigida a la población migrante venezolana y colombianos retornados de Venezuela, asentados en los sectores en donde la Iglesia de Santa Rita tiene alguna influencia y ejerce su acción pastoral. Se contó con la presencia de la Cruz Roja, la cual puso a disposición de la población migrante todo su excelente equipo de profesionales del área de la salud, más los equipos logísticos y humanos necesarios para llevar a cabo la jornada.
Por parte de la Cruz Roja, se habilitaron 500 cupos para atención médica, pediátrica, ginecológica, odontológica, psicológica, y así mismo los niños contaron con la asistencia de nutricionistas y con servicio de vacunación y desparasitación, además de entrega de medicamentos y de exámenes de laboratorio.
La atención inició desde las 7:00 am, culminando pasadas las 4:00 pm, y adicional a los 500 cupos establecidos, se repartieron aproximadamente unos 50 cupos adicionales, ya que el contingente poblacional desbordó las expectativas, y por razones humanitarias y de solidaridad con el hermano migrante se dieron estos cupos adicionales.
Es de resaltar la capacidad logística y de organización de la Cruz Roja y su equipo de voluntarios, puesto que una vez ingresada la persona esta era registrada en una base de datos, y de allí pasaba a los consultorios médicos y odontológicos.
Dentro de esta jornada se tuvo preferencia por las mujeres embarazadas y los niños menores de 6 años. En cuanto a las embarazadas se les ofreció un paquete completo de atención el cual incluía exámenes de laboratorio, valoración por ginecología con servicio de ecografía y charlas educativas en temas de promoción y prevención y salud sexual reproductiva.
Durante el tiempo de espera la Cruz Roja organizó espacios para los niños, en los cuales jugaban y se distraían mientras las madres esperaban por ser atendidas, además de ofrecer un nutritivo refrigerio, y contar con puntos de hidratación. Al finalizar todo el proceso de atención médica pasaban a la zona de farmacia para la entrega de sus medicamentos.
Adicional al servicio médico prestado, también se habilitó un punto de llamadas internacionales, en el cual todas las personas se podían comunicar con sus parientes y seres queridos tanto en Venezuela como en cualquier otro país del mundo.
Finalmente debemos agradecer a la Cruz Roja y a las demás organizaciones participantes, tales como la USAID y la OIM, por facilitar este tipo de espacios y ayudarnos a ayudar, porque al hermano venezolano SANTA RITA LE DA LA MANO.